Renault Grand Scénic

TRAS 20 AÑOS DE ÉXITOS Y CASI 5 MILLONES DE UNIDADES VENDIDAS, LA CUARTA GENERACIÓN DEL DINÁMICO Y VISTOSO MONOVOLUMEN GRAND SCÉNIC NOS MUESTRA UNA IMAGEN MÁS ELEGANTE Y DEFINIDA. DETALLES COMO LA CARROCERÍA BITONO O LAS RUEDAS DE 20”, QUE INCLUYE DE SERIE, CONTRIBUYEN A REALZAR SU ATRACTIVO.

Mucho más llamativo que sus antecesores, el renovado Grand Scénic incorpora de serie la nueva propuesta lumínica, al igual que el resto de modelos, con faros delanteros en forma de C y con un vistoso efecto 3D en los faros de la parte trasera; a diferencia de su hermano Scénic se han colocado de forma vertical, recordando al modelo Espace.

Llaman la atención los nuevos elementos de estilo que forman parte de este Grand Scénic que, además de aportar una nueva expresión y equilibrar sus proporciones, sirven para realzar un carácter más poderoso del modelo: reducción del voladizo trasero, vías más anchas con las ruedas prácticamente pegadas a las cuatro esquinas y una distancia al suelo mayor. De hecho, y aun siendo mayor la distancia al suelo, las ruedas de 20 pulgadas hacen que la silueta lateral esté marcada por un gran dinamismo, rebajando visualmente la distancia al techo, además de llenar los pasos de rueda a modo de los deportivos más radicales.

Claramente beneficiado en longitud, anchura, distancia al suelo y distancia entre ejes respecto a la versión anterior, las medidas totales del monovolumen de Renault son: 4,634 m de longitud, 1,866 m de anchura y 1,655 de altura, con una batalla de 2,804 m. El peso parte desde los 1.485 kg del Energy TCe 130 con transmisión manual hasta los 1.660 kg del modelo Energy dCi 160 EDC.

Blanco Glaciar, Beige Duna, Blanco Nacarado, Rojo Carmín, Gris Casiopea, Azul Celeste, Negro Brillante, Azul Cosmos, Gris Platino o Marrón Visón son los diferentes colores de carrocería entre los que podemos elegir el Renault Grand Scénic.

Práctico, espacioso y confortable son valores que permanecen desde sus inicios. Desde la posición del conductor se goza de una buena visibilidad en todas las direcciones, mejorando ostensiblemente la visión lateral gracias a una luna parabrisas de diseño panorámico y con una mayor inclinación.

El cuadro de mandos, sencillo y muy fácil de interpretar, lo componen un gran reloj central con una imagen configurable en función del modo de conducción que hayamos seleccionado a través de la tecnología MULTI-SENSE (velocímetro, contador de revoluciones, consumos…) y, a cada uno de los lados, sendos indicadores con la temperatura del motor (izquierda) y la capacidad del depósito de combustible (derecha).

Una gran pantalla táctil en el centro del salpicadero y presidiendo la consola central nos ayuda a configurar elementos del vehículo como los sistemas de asistencia al conductor, climatizador, sistema de navegación o equipo multimedia. Diseño tan puro que lleva la simpleza y facilidad de uso a la máxima expresión. Pocos son los botones que encontramos: mando del sistema MULTI-SENSE, climatización, modo ECO, cierre de puertas, desactivación Start/Stop…

Tablero de a bordo y consola central

La versátil consola central “deslizante” con una capacidad de almacenaje de 13 litros de volumen, cuenta con una guantera iluminada y cierre de cortina, reposabrazos, dos tomas USB y una conexión Jack en la parte delantera.

En la parte trasera una toma de 12 V, dos tomas USB y una toma Jack acompañan a una guantera específica.

Situada en posición avanzada, esta consola central se encuentra a disposición del conductor y del acompañante, mientras que si se desplaza al máximo a la posición trasera servirá de separación con los asientos traseros.

Al seleccionar los distintos modos de conducción (Sport, Confort, Neutro, ECO y personalizado), a través del mando MULTI-SENSE que encontramos al lado de la palanca de cambios, se ajustarán características como climatización, la respuesta y sonoridad del motor, sensibilidad del acelerador, dureza de la dirección e incluso el ambiente luminoso del interior cambiando a colores sepia, violeta, rojo, azul o verde. Se obtiene así el máximo provecho de cada situación que se nos pueda plantear, adaptando el tipo de conducción que queremos a cada momento.

Renault, al optar en toda la gama por una única medida de neumáticos (195/55R20) con un perfil de 107 mm de altura y baja resistencia a la rodadura ha posibilitado un reglaje de chasis completamente adaptado a las características del Grand Scénic, consiguiendo una elevada relación entre confort y comportamiento en carretera, reforzando también con ello aspectos como la estabilidad y el poder de frenado, sin dejar de lado una aceptable agilidad y, por supuesto, un mayor ahorro energético. Y es que como dice Renault, “debido a sus grandes dimensiones, las ruedas de Scénic absorben mejor los baches de la carretera y ofrecen más confort a los pasajeros”.

Pero no sólo son las ruedas las que aportan bondades; los asientos también ganan en comodidad en esta generación, más anchos, con mejor sujeción lateral y espumas de doble densidad, y también suman a la hora de llevar a los ocupantes a sentirse mejor que nunca.

Los asientos traseros -recordemos que se trata de un modelo con el que podemos pasar de 5 a 7 plazas en un santiamén, con una configuración modulable 2+3+2-, resultan apropiados en relación al tamaño del coche y facilitan los desplazamientos de toda la familia, si bien el espacio para las piernas de las dos últimas plazas sólo será ideal para que viajen los más pequeños.

La provechosa capacidad del maletero, 596 litros con 5 plazas, que aumenta en 40 litros la capacidad del Grand Scénic de la anterior generación y lo sitúa entre los mejores de su categoría, se reduce a 233 libros con todas las plazas ocupadas (7). A este espacio de carga se suman otros compartimentos, como los situados bajo el piso, incrementando el volumen en más de 60 litros adicionales.

El sistema One Touch Folding heredado del Espace permite, también en este Grand Scénic, abatir con un solo movimiento los asientos traseros (tanto la segunda fila como la tercera) y así conseguir un piso de carga plano. Esta función puede accionarse desde dos sitios diferentes: desde el maletero o desde el sistema R-LINK 2.

Y es que la tecnología y el equipamiento son otro de los aspectos interesantes en este Renault Grand Scénic. Las propuestas de la marca son:

LIFE. Volante de cuero regulable en altura y profundidad; elevalunas delanteros y traseros eléctricos; retrovisores exteriores eléctricos color carrocería, antiescarcha y con luces LED de intermitente; banqueta trasera 1/3-2/3 deslizante y abatible manualmente bajo suelo plano, asiento del conductor con regulación en altura; climatizador manual, ordenador de a bordo, indicador de cambio de velocidad, radio con 4 altavoces + bluetooth con pantalla 4,2”, conexión USB y Jack, mandos de la radio en el volante; alerta de exceso de velocidad con reconocimiento de señales de tráfico; Stop/Start, ayuda al arranque en pendiente, regulador y limitador de velocidad; luces de día con tecnología LED, luces traseras con tecnología 3D Edge Light y sistema de control de presión de neumáticos.

INTENS (LIFE+). Parabrisas atérmico, retrovisores exteriores eléctricos, tablero de a bordo TFT color de 7 pulgadas personalizable, toma de 12 v en 1ª y 2ª fila de asientos, asiento de conductor con regulación en altura y lumbar, tarjeta manos libres, encendido y cambio automático de luces carretera/cruce, sensor de lluvia, cinturón de seguridad de conductor y pasajero regulable en altura, climatizador automático bizona, consola central deslizante Easy Life, radio con pantalla táctil de 7” con bluetooth y USB, compatibilidad con Android Auto y Apple Carplay, unidad de conectividad, faros antiniebla y alerta de cambio involuntario de carril.

ZEN. Además de los elementos citados anteriormente, este acabado añade cortinas laterales traseras, asiento de pasajero abatible, guantera Easy Life, banqueta de asientos traseros abatible con sistema “One Touch”, Renault MULTI-SENSE con iluminación de ambiente, sensores de aparcamiento delantero y trasero con cámara de marcha atrás; 2 puertos USB, 1 puerto Jack y 1 toma de 12V en la parte trasera; faros delanteros Full Led, freno de aparcamiento asistido, detector de fatiga y R-LINK 2 con sistema de navegación 3D y pantalla táctil de 8,7”.

Además de este amplio equipamiento que propone Renault en los acabados de serie, en función de la terminación, el Megane Grand Scénic puede incorporar, de forma opcional, una extensa gama de interesantes elementos como: asistente de mantenimiento de carril con corrección de la trayectoria del vehículo, regulador de velocidad adaptativo, Head-up display en color, ayuda al aparcamiento manos libres, detector de ángulo muerto, asientos delanteros con regulación eléctrica, sensor de aparcamiento lateral o asientos delanteros calefactables.

Dentro de esta abundancia de equipamientos, muchos de los elementos citados los encontraremos también formando parte de completos paquetes:

  • Pack City. Compuesto por Easy Park Assist + Sensor de aparcamientos lateral + Detector de ángulo muerto.
  • Pack Safety. Regulador de velocidad adaptativo + Head-Up Display a color + Alerta de distancia de seguridad + Asistente de mantenimiento de carril.
  • Pack Night. Faros Full LED + Head-up display a color.
Faros Full LED

A través del intuitivo sistema multimedia R-LINK 2 y su pantalla táctil vertical de 8,7 pulgadas -en función de la versión también horizontal de 7”-, accedemos a distintas tecnologías que convierten los desplazamientos en todo un placer: bluetooth, navegación, multimedia, apps y configuración del vehículo que, con la tecnología MULTI-SENSE, nos permite elegir el comportamiento del vehículo entre 5 modos diferentes de conducción, así como personalizar y memorizar nuestras preferencias hasta en 6 perfiles de reglaje diferentes (sonido, multimedia, asientos, retrovisores, configuración de las páginas de acceso, preferencias de navegación…).

Gracias al reconocimiento de voz, a través de un simple toque prolongado en el botón del volante destinado para ello, R-LINK 2 nos ofrece la posibilidad de acceder a determinadas funcionalidades del sistema sin distracciones, como enviar SMS, iniciar el guiado de un trayecto hacia el destino indicado, cambiar la emisora de radio o llamar por teléfono a cualquiera de nuestros contactos.

Gracias al Head-Up Display a color, disponemos de toda la información esencial (velocidad, navegación GPS o sistemas de ayuda a la conducción) sin desviar la vista de la carretera.

Otros elementos como el Easy Park Assist, también nos facilitan la vida a bordo de este Grand Scénic, gracias a sus sensores y a la cámara de visión trasera; bastará con estar pendientes de los pedales de freno y acelerador para convertir el aparcamiento en la operación más sencilla.

Aprovechando la oportunidad que nos concedió Renault de acceder al motor más potente de la gama Grand Scenic, comprobamos en la prueba realizada que el Energy dCi 160 EDC se trata de un motor diésel Twin Turbo enérgico y vigoroso que, independientemente del tipo de vehículo en el que vaya montado, transmite grandes sensaciones. Acompañado además, de serie, de la caja automática EDC de doble embrague, proporciona un gran equilibrio entre capacidad y eficiencia.

Por otra parte, el motor diésel Energy dCi 130, a buen seguro uno de los más solicitados, se encargará de satisfacer a diario a los más exigentes en cuanto a un consumo de combustible moderado y suavidad de marcha sin desistir de una conducción alegre.

El resto de motores diésel lo componen un diésel Energy dCi 110 CV y su variante híbrida -Hybrid Assist-, en el que el motor térmico, que se mantiene en constante funcionamiento, es asistido por un motor eléctrico alimentado por una batería de 48 voltios, permitiendo la recuperación de energía en situaciones de frenado y deceleración sin alterar el placer de conducción, añadiendo en ciertas condiciones un par motor de 15 Nm y reduciendo el consumo y las emisiones CO2 entre un 8% y un 10%, aproximadamente. En resumen, más empuje y menos consumo.

Como novedad, destaca la inclusión en este 2018 de un nuevo propulsor TCe de gasolina con 1.330 cc y cuatro cilindros desarrollado conjuntamente con Daimler y fabricado en Valladolid. Ofreciendo tres niveles de potencia 115 CV, 140 CV y 160 CV, el primero está disponible sólo con caja de cambios manual y los dos de mayor potencia con opción de caja manual o automática EDC de doble embrague.

Gracias a la incorporación de la tecnología de revestimiento de los cilindros “Bore Spray Coating”, procedente del Nissan GT-R, reduce fricciones y gana en eficiencia, optimizando la conductividad térmica. También se integra la tecnología “Dual Variable Timing Camshaft”, que se encarga de controlar las válvulas de admisión y de escape en función de la demanda del motor. Se da la particularidad de que en todas las potencias, según datos de la marca, el consumo mixto es de 5,6 litros cada 100 km con cambio manual y 5,5 l/100 km en el caso de los automáticos, con un par motor de 220 Nm, 240 Nm y 260 Nm respectivamente, lo que hace de cada una de estas versiones una opción muy a tener en cuenta.

Caja de cambios

Y si el funcionamiento de estos motores es plenamente convincente para el usuario, el modelo de Renault se ve acompañado en todo momento por unas ágiles y agradables cajas de cambio, a la altura del conjunto, pudiendo elegir entre manuales de 6V o automáticas de 6V o 7V, según versiones.

Adaptable tanto a ritmos más elevados como a una conducción relajada, la caja de cambios automática EDC con doble embrague que propone Renault en varias versiones del Grand Scénic (incluida la unidad objeto de nuestra prueba), además de contar con un equilibrado escalonamiento y un funcionamiento suave y rápido, sobresale por un bajo consumo, comparable al ofrecido por una caja manual, pero siempre con un punto más de confort y placer de conducción.

Mantenimiento de carril

Suspensión

La robusta estructura de la carrocería, junto con un reglaje de chasis perfectamente adaptado a las peculiaridades del Grand Scénic, consiguen un estupendo comportamiento en carretera que se ve reforzado por una suspensión con un tarado un tanto “durillo”, que no afecta en exceso a la comodidad de los ocupantes y sí lo dota, por otra parte, de una destacable agilidad y estabilidad en marcha, mitigando el balanceo en curvas.

Seguridad

La estructura del nuevo Grand Scénic ha sido diseñada utilizando aceros reforzados, algunos de ellos de ultra alto límite elástico, que resiste cada mm2 una presión de 120 kg. Como complemento, en el exterior del habitáculo el uso de aceros con deformación programada es de gran ayuda a la hora de proteger a los ocupantes en caso de accidentes.

Entre los sistemas de seguridad y ayuda a la conducción que el Grand Scénic incluye de serie desde el acabado más básico Live destacan la ayuda a la frenada de emergencia -SAFE-, airbag frontal de conductor, airbag frontal de pasajero, airbags laterales delanteros, airbags de cortina, control dinámico de trayectoria -ESC-, sistema de vigilancia de la presión de neumáticos, alerta por exceso de velocidad con reconocimiento de señales de tráfico, frenada de emergencia asistida con detección de peatones, regulador limitador de velocidad y alerta de colisión frontal. Ya el acabado Intens añade el cambio involuntario de carril, así como el cambio automático de luces carretera/cruce y la terminación Zen lo aumenta con alerta de detección de fatiga.

Leal a su origen, el Renault Grand Scénic sigue destacando por su practicidad y espacio, así como por la integración de las últimas novedades tecnológicas tanto en seguridad, como en confort y placer de conducir.

Para saber más