Editorial: ¿Cuánto vale nuestra marca?

La ONU, por primera vez, ha incluido el valor de marca en el Índice de Innovación Global.

Este índice es una importante herramienta para evaluar el progreso anual de la innovación en el mundo, estableciendo las respectivas ventajas competitivas de los países, las economías y las empresas individuales. A través de 80 indicadores, se obtiene una amplia visión de la importancia que cada país concede a la innovación: conocimiento y tecnología, infraestructura, sofisticación empresarial, entorno político… Ahora, también, el valor de la marca.

La innovación se encuentra en el corazón mismo de la misión de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (perteneciente a la ONU); con ella, el respeto a la propiedad intelectual. Con la incorporación del valor de marca, se reconoce su trascendencia para ayudar a reflotar la economía mundial tras la recesión causada por el COVID-19.

El papel de la marca constituye un aliado estratégico en la innovación de cada país. Para valorar este intangible existen dos normas ISO, la 10668 y la 20671, de valoración y evaluación de marcas, respectivamente.

La creación por empresas nacionales de marcas globales puede conseguir que el país sea más competitivo. En el prestigioso listado Fortune Global 500 2020, MAPFRE aparece como una de las marcas de seguros más fuerte, valiosa e importante en España y a nivel global. Se estudia la percepción del consumidor sobre la marca, su conocimiento, la familiaridad… Para ello se emplean KPI que miden la calidad, reputación, valor por dinero, confianza, lealtad e innovación, a través, entre otros índices, de su NPS, o Net Promoter Score.

Frente al ciberataque perpetrado a la Compañía, el pasado mes de agosto, MAPFRE ha reaccionado de un modo ejemplar. No solo pasaron únicamente horas desde su comunicación pública, a través de redes, web corporativa y declaraciones personales de su presidente y vicepresidente. También se puso en marcha el Plan de Continuidad de Negocio, diseñado para casos excepcionales, y hasta se indemnizará a los clientes perjudicados. Un ejemplo de transparencia que no hace sino aumentar el valor de nuestra marca.

¡Enhorabuena!