Opel Grandland X (2018)

El Opel Grandland X (2018), con carrocería de tipo todoterreno de 5 puertas y de tamaño compacto, dispone de un habitáculo muy espacioso, una posición elevada de los asientos, buena visibilidad general, fácil entrada y salida del vehículo y mucho espacio para el equipaje.

Con relación al comportamiento de la carrocería, el fabricante tiene en cuenta que, en caso de accidente, el vehículo no se detenga bruscamente, sino de forma progresiva para no transmitir deceleraciones altas a los ocupantes. Para ello diseña carrocerías deformables, pero suficientemente rígidas para proteger a los ocupantes. Así, para una deformación programada incorporan a las partes frontal y posterior del vehículo dos traviesas transversales fabricadas con aluminio de 3,5 mm de espesor.

La versión estudiada en CESVIMAP, Ultimate, monta numerosos sistemas avanzados de ayuda a la conducción (ADAS), entre los que se encuentran algunos de los más importantes, como el sistema de frenado autónomo de emergencia (AEB), el sistema de frenado autónomo de emergencia con detección de peatones (PCW) y el sistema activo de mantenimiento de carril (LKS).

También destacamos el buen funcionamiento del sistema pasivo de alerta de ángulo muerto (BSD), que avisa al conductor, de manera visual, cuando se encuentra un obstáculo en su zona de ángulo muerto, y los sistemas de asistencia al aparcamiento, con sensores de ultrasonidos en la parte delantera y trasera del vehículo y cámaras, que permiten visualizar su perímetro.