La “caja negra” del automóvil

CUANDO SE ANALIZAN LOS DATOS DE ACCIDENTES DE VEHÍCULOS, Y OTRAS PRUEBAS FÍSICAS, PODEMOS COMPRENDER QUÉ SUCEDIÓ ANTES, DURANTE Y DESPUÉS DEL SINIESTRO. ESTO APORTA INFORMACIÓN FUNDAMENTAL AL PERITO, PARA LLEVAR A CABO UNA CORRECTA COMPROBACIÓN DE DAÑOS EN EL VEHÍCULO, Y PARA LA RECONSTRUCCIÓN DEL ACCIDENTE.

Las herramientas CDR (Crash Data Retrieval) conectan y se comunican con distintas redes de diagnóstico, a través del conector del OBD, y acceden a los módulos de control electrónico del vehículo para descargar la información recogida por los sistemas EDR.

Tras un accidente, numerosos datos del estado del vehículo quedan recogidos en el registrador de datos de eventos (Event Data Recorder, EDR). El EDR es un dispositivo o función de un vehículo que registra información del accidente de manera detallada.

Al analizar los datos de accidentes de tráfico (se almacenan en el vehículo), podemos evaluar más eficazmente posibles fallos, responsabilidad, testimonios y otras pruebas. El uso de datos del EDR en casos civiles y penales aumenta cada vez más, según se van aceptando como fuente fiable de pruebas.

Equipos ADAS

Actualmente, este sistema se usa plenamente en EEUU por Fuerzas del Orden, peritos reconstructores, gestores de flotas… El Reglamento (UE) 2019/2144 recoge el requerimiento en los equipos de sistemas ADAS, protección de peatones y EDR en vehículos de motor nuevos. En 2022 entrará en vigor la norma para nuevas homologaciones y, en 2024, para nuevas matriculaciones.

Las primeras marcas en implementar los sistemas EDR en Europa son las que tienen una fabricación con visión global, no diferenciada por mercados o geografías. Destacan: Audi, Chrysler, Fiat, Jeep, Lancia, Lexus, Toyota, Volkswagen y Volvo.

Al conectar la CDR a un vehículo accidentado realizará un informe con los datos de dicho accidente y del estado del vehículo. En los últimos años, una de las marcas que está implementado el sistema EDR en sus modelos es Volkswagen. Otras -como Toyota, Chrysler y Mitsubishi- lo llevan haciendo desde hace más de diez años. Por eso, hemos elegido un modelo Volkswagen para conocer qué datos se pueden obtener con las herramientas CDR.

Gráfica 1 : Velocidad, Freno y ESP frente al tiempo

Práctica de uso de herramientas CDR

Analizamos un Volkswagen, modelo T-Roc, de 2018. En el momento del siniestro el vehículo había recorrido 26100 km, con un tiempo total de uso de 531,27 h.

Elementos de seguridad:

  • Cinturones de seguridad: Activado el del conductor.
  • Pretensores: Se activaron a los 24 milisegundos.
  • Airbag: Se activó a los 39 milisegundos (un offset de 15 milisegundos).

Realizando el diagnóstico del accidente con el CDR, obtuvimos un informe con tres registros. En el mismo instante se produjeron dos impactos; uno delantero, y otro trasero. El tercer registro, se produjo unos 3 segundos antes del segundo registro. La precisión de la máquina, en cuanto a la hora de impacto, es de segundos; de ahí que los impactos traseros y delanteros aparezcan en el mismo instante de tiempo. Lo cierto es que ocurrieron bajo un desfase de milisegundos.

Recogida de datos del vehículo con la máquina CDR.

Para entender el contenido de estas gráficas, es necesario conocer el criterio de signos adoptado por el CDR, que se resume en la tabla 2. En la gráfica 1 se representa la velocidad desde los 8 segundos previos al impacto, sensor de pedal de freno y control de estabilidad.

Conclusiones gráfica 1

A la vista de la gráfica 1 obtenemos estas conclusiones:

  • El vehículo circulaba a una velocidad de 108 km/h antes del impacto (ocho segundos antes de la colisión). En función de la vía por la que circulara, se podría determinar si está dentro de los límites de velocidad.
  • El pedal del freno está activado. Puede indicar que la velocidad a la que circulase fuera mayor, ya que, aun frenando, el CDR recogió una velocidad de 108 km/h.
  • Las revoluciones cayeron rápidamente desde las 1800 rpm hasta las 1024-960 rpm. Quiere decir que el conductor, una vez que accionó el freno, pisó el pedal del embrague (el coche tiene una caja de cambios manual de 6 velocidades).
  • El control de estabilidad se activó alrededor de medio segundo antes de la colisión, por un giro brusco de volante hacia la izquierda. Puede indicar que el conductor intentó realizar una maniobra evasiva, no fue muy eficaz, a la vista de los resultados.
  • El ABS no se activó en ningún momento previo a la colisión, al igual que el pedal del acelerador.

Esto se refiere a instantes antes de la colisión. A partir de aquí, estudiaremos los milisegundos posteriores al accidente para verificar cuáles fueron las aceleraciones y velocidades sufridas por los integrantes del vehículo. Lo hemos representado en una sola gráfica para que, de forma visual y rápida, se entienda el accidente completo.

Conclusiones gráfica 2

Respecto a la gráfica 2 podemos hacer los siguientes comentarios:

  • Los colores rojos se refieren al impacto delantero, los azules, al impacto trasero.
  • El Delta-V longitudinal es la variación de velocidad en la dirección longitudinal que experimenta el vehículo en el accidente. Para el caso delantero tiene, como máximo, 15km/h hacia atrás. Quiere decir que el incremento de velocidad respecto a la que circulaba el vehículo en el momento del impacto es de -15 km/h; es decir, ha reducido en esa velocidad la que tenía.

Para el impacto trasero, se puede dar la misma explicación. Experimenta un incremento de velocidad máximo de unos 23 km/h.

  • Hay que tener en cuenta la aceleración longitudinal (negativa en el caso de impacto delantero y positiva en el impacto trasero), al estudiar las lesiones que puede producir en el cuello principalmente. En el impacto trasero, las lesiones más comunes que pueden sufrir los integrantes del vehículo son los latigazos cervicales.

El orden de magnitud de las aceleraciones está alrededor de 9 g (es decir, 9 veces la aceleración de la gravedad) en el impacto delantero. En el trasero tenemos un pico de 7 g, que, seguramente, lesionó el cuello del conductor de manera que tuviera que portar collarín.

  • Las aceleraciones, una vez que se produce el accidente, se anulan hacia los 110 milisegundos, mientras que las velocidades siguen teniendo valor hasta el máximo de tiempo.

CDR también registra magnitudes referidas a la componente lateral, como, en este caso, el impacto ha sido principalmente en la dirección longitudinal, no tiene mucha información relevante respecto al peritaje ni a la reconstrucción de accidentes de tráfico.

Gráfica 2: Comparación del impacto delantero (1) y Trasero(2)

Ayuda para peritos y reconstructores de accidentes

Los datos obtenidos ofrecen información acerca de la velocidad de circulación, la aceleración que el vehículo ha sufrido en el momento del accidente o las revoluciones del motor y la posición del pedal de freno y pedal de aceleración.

También, determina la posición del vehículo gracias a los parámetros obtenidos acerca del estado del control de estabilidad, la posición y la velocidad de giro del volante.

Además, se obtiene el tiempo transcurrido entre varios impactos o las veces que el vehículo ha sido arrancado desde el accidente. Estos parámetros pueden variar en función del sistema EDR instalado.

El profesional de la peritación puede obtener una información muy útil sobre los parámetros de conducción en el momento inmediatamente anterior a la ocurrencia del siniestro. Estos parámetros permiten establecer la correspondencia de los daños con el relato de siniestro aportado por el asegurado en la declaración del siniestro

En cuanto a la reconstrucción de accidentes de tráfico, las herramientas CDR permiten esclarecer algunos de los factores más influyentes en el siniestro, tales como la velocidad de circulación o el momento en el que el conductor acciona los mandos de freno o dirección para evitar el siniestro.

Además, las CDR consiguen rescatar la información más relevante contenida en los 5 segundos previos a la colisión y, considerando que un impacto, por norma general, dura entre 50 y 150 milisegundos, la información que puede trasmitir sobre las condiciones de circulación es fundamental para estudiar el siniestro.

Por otro lado, puede resultar de gran utilidad en los accidentes por alcance o biomecánicos, gracias a los datos recogidos de las variaciones de velocidad longitudinal y transversal, como consecuencia de la colisión (Delta Velocidad). Esta Delta V permite calcular la energía absorbida por el vehículo tras sufrir un impacto, y, por tanto, la soportada por sus ocupantes.

Como se puede observar, el manejo de este tipo de herramientas es sencillo y está al alcance de cualquiera.

Las herramientas CDR son de gran valor para peritos y reconstructores de accidentes al aportar información clara y fiable de los segundos inmediatamente anteriores al accidente. Facilita el trabajo a la hora de determinar las causas del impacto y el estado del vehículo en los momentos del accidente.

Gracias asDARTS, por la cesión de la herramienta Bosch CDR-900 para la realización de pruebas en modelos de varias marcas). 

Si quieres conocer en profundidad estas y otras herramientas para reconstruir accidentes de tráfico (para gabinetes periciales, especialistas, etc.), aquí puedes encontrar formación relacionada de CESVIMAP.