Heladas y parabrisas: consejos para retirar el hielo y las precauciones que debemos tomar en invierno

A man cleans frozen windshield by scratching, cold morning

Es necesario prestar especial atención al estado del parabrisas ante las bajas temperaturas y las complicadas condiciones de visibilidad en esta época del año. El frío y los cambios bruscos de temperatura pueden convertir en una grieta irreparable un pequeño impacto en el parabrisas. Descongelar el parabrisas con agua muy caliente, o con la calefacción a temperatura elevada, podría provocar su rotura.

El 90% de la información que recibimos al conducir nos llega a través de la vista. Y con nieblas, lluvias y nevadas frecuentes, es de vital importancia tener el parabrisas y las escobillas en perfecto estado. Unos limpiaparabrisas deteriorados provocan franjas o superficies veladas en el campo de visión al accionarlos, con la consiguiente merma de seguridad. Se recomienda sustituirlos, como mínimo, una vez al año. Para conservarlos en el mejor estado posible si el coche pasa las noches a la intemperie, es recomendable levantarlos o ponerles un cartón debajo. También se puede proteger el parabrisas del hielo utilizando algo tan sencillo como el cartón.

winter driving – scraping ice from a windshield

Carglass® recomienda instalar en el parabrisas un tratamiento específico repelente de líquido e insectos, puesto que mejora sustancialmente la visibilidad diurna y nocturna en situaciones de lluvia, facilita la limpieza; y lo más importante, en invierno evitaría la congelación de las lunas en condiciones no muy extremas.

El depósito de líquido limpiaparabrisas no debe rellenarse sólo con agua, para evitar que se congelen los manguitos y se obstruyan los pulverizadores a bajas temperaturas.

¿Cómo retirar el hielo por las mañanas?

Por otro lado, siempre hay que retirar el hielo antes de emprender la marcha. Aunque esto parezca una obviedad, sigue habiendo conductores que arrancan con él, esperando a que la calefacción y los limpiaparabrisas hagan su efecto, mientras recorren muchos metros sin apenas ver lo que sucede delante del volante, generando una situación potencialmente peligrosa. 

Descongelar el parabrisas con agua muy caliente, o con el aire de la calefacción a temperatura elevada, puede dañarlo seriamente por el cambio brusco de temperatura, provocando su rotura. Y este efecto se intensifica notablemente si el parabrisas tiene un impacto. En los experimentos realizados con una temperatura externa de -10ºC, el 81% por ciento de los parabrisas con un impacto se rompió en menos de cinco minutos tras encender la calefacción. A -5º, esa tasa es del 70% e, incluso, a 0 ° C sigue siendo muy alta: un 59%. Esas mismas pruebas se realizaron con parabrisas reparados con la tecnología desarrollada por Carglass y ninguno se rompió. Estos estudios han sido realizados en 2011 por el propio departamento de investigación y desarrollo del Grupo Belron (BelronTechnical), y por diferentes universidades e institutos (Universidad Metropolitana de Swansea, Instituto MIRA, Universidad Ecole Central de Lyon e Instituto Ceram en Francia), con el objetivo de tener el máximo conocimiento científico en esta materia.

Para retirar el hielo, Carglass recomienda utilizar una rasqueta de plástico, o rociar el cristal con alcohol. No es recomendable accionar los limpiaparabrisas cuando el cristal está helado, pues se daña la superficie de las escobillas.

El parabrisas, un elemento clave en la seguridad de un vehículo

Las lunas del automóvil son un elemento clave para la seguridad. En primer lugar, por sus evidentes implicaciones en la correcta visibilidad al volante. No menos importante, el parabrisas aporta hasta el 30% de la resistencia de la estructura del vehículo y es un elemento fundamental para evitar el hundimiento del techo, en caso de vuelco. Además, la eficacia del airbag del acompañante está condicionada por el buen estado del parabrisas, pues, al desplegarse, se apoya sobre él, ejerciendo una enorme presión que podría llegar a arrancarlo.

Por último, la inmensa mayoría de las cámaras de los sistemas de seguridad ADAS están instalados en el parabrisas. Cuando se sustituye un parabrisas, hay que desmontar las cámaras del cristal roto y montarlas en el nuevo. Una vez instalados, estos sistemas han de ser recalibrados para asegurar que funcionan con la máxima precisión y proporcionan la información correcta a los sistemas de seguridad. Carglass® ofrece cobertura de calibración de tecnología ADAS en todo el territorio español; sus técnicos están altamente cualificados para calibrar estos sistemas utilizando instrumentos de alta precisión que permiten que esta tecnología vuelva a funcionar correctamente.