La peor caída de la serie histórica, las matriculaciones de turismos y todoterrenos en enero descienden un 51,5%, hasta las 41.966 unidades. No hay un mes de enero peor desde 1989, año en que se comenzó el registro mensualizado de ventas como el actual.
Una serie de hechos negativos han arrasado con la demanda. La borrasca Filomena, la comparación con un mes de enero de 2020, en el que no habían empezado aún las restricciones por la pandemia del CoVid19, en 2021 hubo dos días laborables menos han hecho recortar las ventas. Pero estos tres efectos se han visto agravados por la subida del Impuesto de Matriculación en enero y el fin del plan RENOVE, pese a no haber consumido el 80% de los fondos. Estos dos impactos, que sin duda han rebajado el mercado, se podían haber corregido y la caída hubiera sido inferior.
Las emisiones medias de CO2 de los turismos vendidos en el mes de enero se quedan en 127,2 gramos de CO2 por kilómetro, pero es el primer mes que este dato responde a la nueva medición WLTP.
Todos los canales pierden casi la mitad de sus ventas en enero de 2021. El canal de empresas es el que menos recorta, con una caída del 43,9% y 18.397 unidades, aunque el más perjudicado es el canal de alquiladores, con una caída del 65,4%.
VEHÍCULOS COMERCIALES LIGEROS
En enero, se han matriculado 9.544 vehículos comerciales ligeros, un 31,1 % menos que en enero de 2020. El segmento más afectado es el de comerciales ligeros de menos de 2,8 toneladas, con una caída del 30,3%, hasta las 871 unidades.
INDUSTRIALES Y AUTOBUSES
Las matriculaciones de vehículos industriales, autobuses, autocares y microbuses registraron una caída un poco menor que los demás segmentos de vehículos, un 19,4% de descenso durante enero, con 1.996 unidades entregadas. La peor caída la registró el segmento de los autobuses, autocares y microbuses, con una caída del 61,5%, hasta las 129 unidades.
A estas cifras ha contestado ANFAC, en la persona de Noemi Navas, directora de Comunicación, “a un mercado en situación de extrema debilidad por la pandemia y la crisis económica, se le han añadido dos factores muy negativos: la subida del impuesto de matriculación y el fin del plan de achatarramiento RENOVE, con el 80% del presupuesto sin consumir, efectos que se podían haber corregido y que han contribuido a terminar de hundir las ventas en enero, con una cifra históricamente baja. Seguimos pensando desde ANFAC que es posible corregir aún esta subida del impuesto, como hizo Italia en la última semana de diciembre para intentar compensar el desplome del mercado, y recuperar el plan de achatarramiento de manera estable. Porque en nuestro modelo de descarbonización hay dos ejes: el impulso al vehículo eléctrico y la renovación del parque. Ambas patas son necesarias para reducir las emisiones de CO2 y mejorar la calidad del aire de las ciudades contribuyendo a mantener e impulsar la industria y el empleo”.
Por su parte, Raúl Morales, director de comunicación de FACONAUTO, comenta “Se puede decir que el mercado de automoción prácticamente desapareció en enero. La confianza del consumidor sigue en mínimos, la recaída en la pandemia, con las consecuentes restricciones de movilidad, y el impacto de la borrasca Filomena han sido determinantes, pero a esto hay que sumar que en diciembre hubo clientes que adelantaron su compra para evitarse la subida del impuesto de matriculación. Enero no suele ser un mes que destaque, pero el dato de este año pone de manifiesto el delicado momento que atraviesa el sector y, lo que es más preocupante, los difíciles meses que aún quedan por delante, al menos durante el primer semestre de este año. Recuperar la demanda es urgente para romper con esta espiral negativa. Y teníamos la herramienta para conseguirlo: Si se hubiera dado continuidad al Plan Renove que estaba operativo, con algún retoque para mejorarlo, seguramente estaríamos hablando de caídas menores y de mejores perspectivas para los próximos meses”.
Según la directora de Comunicación de GANVAM, Tania Puche, “arrancamos el año con el volumen más bajo desde que hay estadísticas, por lo que urge reactivar la demanda con medidas eficaces y de rápida implantación. El fin del Renove, que ha terminado con más de 200 millones de euros sin consumir, y la subida del impuesto de matriculación como consecuencia de la nueva medición de emisiones de CO2 son asuntos que deben tener prioridad en la agenda política si se quiere facilitar la recuperación de un sector estratégico que representa el 11% del PIB”.