La crisis de los microchips

La crisis de los microchips ha derivado en parones puntuales en las cadenas de producción de automóviles. Las marcas operan a medio gas y una de las consecuencias será que las matriculaciones tácticas apenas crezcan un 1% este año -no hay tantos vehículos que mandar a los concesionarios-. Los datos que maneja MSI son 100.000 unidades

Esta falta de stock lleva a los compradores a cambiar hacia el mercado de ocasión como alternativa más económica frente al incremento de los precios de los modelos nuevos – entre un 3% y un 6%- y el aumento en los plazos de entrega, que ya superan los tres meses (109 días) tras dispararse un 65% en el último año, según datos de promoCAR de Kantar.

En agosto las ventas de VO casi triplicaron a las de nuevos. Para responder a la creciente demanda, las marcas recurren a las importaciones, lo que explica que éstas aumenten previsiblemente un 12% y alcancen los 79.000 en 2021.

La “parálisis” en el mercado de vehículos nuevos provocará que las ventas de coches de segunda mano se recuperen y alcancen los dos millones este año. La cifra supone un incremento del 10% respecto a 2020. En 2019 antes de la pandemia, el volumen total fue de 2,1 millones de automóviles. Los particulares serán los que más transacciones protagonicen.

Falta de stock también en VO

La falta de stock en el mercado de nuevos también se está dejando notar en el de ocasión, que también sufre la crisis de los microchips. Al frenazo de las automatrículas hay que sumarle las ventas de coches nuevos que han descendido también por la crisis, los rent a car’, que aportan menos coches usados por el parón del turismo; y los particulares, que tardan meses en deshacerse de su coche usado por los retrasos en las entregas.

Así, el número de VO en venta ha caído un 2,5% en los últimos dos meses, de los 416.017 a los 405.858, lo que supone unos 10.000 automóviles menos, según datos de autobiz Sistema VO. Esta bajada de la oferta y la presión de la demanda aumenta los precios. Si en mayo el importe medio para la compra de un VO rondaba los 17.000 euros, actualmente es un 3,6% más, unos 17.648 euros.